Cultivo de la almeja y el berberecho
Las rías gallegas explotadas convenientemente, podrían proporcionar una riqueza inmensa a la región, cultivando en gran escala los mariscos, especialmente los moluscos, y la crisis que en la actualidad sufre la industria conservera, pudiera remediarse en parte sustituyendo la sardina, como materia prima, por el mejillón, la almeja y berberecho.
El mejillón y el berberecho, ofrecen una gran porvenir industrial, pues con ellos se prepara “harina de marisco”, la cual se emplea, para confeccionar sopa de marisco, empanadas y pastelitos, hoy muy en boga en todo el mundo, por el valor alimentario que poseen y el sabor exquisito de los mismos.
Pero para lograr la materia prima de la fábrica es preciso cultivarlos con esmero y depurarlos convenientemente: el mejillón, alemana y berberecho, convenientemente depurados, adquieren los más altos precios, ya que preparados convenientemente, pueden consumirse lo mismo en fresco que en conserva, por los paladares más exigentes.
La técnica del cultivo es la misma para la almeja (babosa y fina) y para el berberecho, con la única diferencia que se opera en fondos diferentes, en cuanto a la profundidad; la almeja babosa vive en fondos que quedan al descubierto en las grandes mareas; en cambio la almeja fina y el berberecho deben cultivarse a niveles un poco más elevados; hablamos, naturalmente, de las condiciones óptimas de dichos moluscos.
PREPARACIÓN DEL SUELO
El suelo o fondo debe prepararse mezclando tres partes de arena y una de tierra de cultivo bien soleada, manteniendo la mezcla por espacio de 15 días en seco, bajo la acción de los rayos del sol, los cuales destruirán toda clase de enemigos; de vez en cuando se da vuelta, con una pala, con el fin de exponer al sol las partículas de tierra y arena en su totalidad.
Esa mezcla de tierra de cultivo y arena, se echará en lugares que previamente han sido defondados en unos diez centímetros de profundidad, en las rías en donde va a emprenderse el cultivo.
Sin más que esta operación “si el parque ha sido bien preparado” en las épocas de puesta se fijará una gran cantidad de cría, lo mismo de almeja que de berberecho, contando, naturalmente, con algún banco natural de dichos moluscos en la ría en donde va a establecerse el cultivo.
RECOGIDA DE SEMILLA
Para recoger la semilla (moluscos de pequeño tamaño) se cribará el fondo con malla del número 5, que separará la semilla gruesa de la fina, quedando la mezcla de arena y tierra en el parque.
La semilla gruesa se lleva a los parques de crecimiento. El suelo del parque de crecimiento, será nuevo, de preferencia llevado la víspera; una vez echado el suelo se rodea de unas tablas, colocadas verticalmente y que sobresalgan del fondo unos 15 centímetros.
No conviene sembrar más de 400 ejemplares por metro cuadrado; se les recubrirá de una capa de arena para evitar que floten; la siembra de jóvenes requiere la misma preparación, pero su densidad no debe pasar los 300 ejemplares por metro cuadrado.
PREPARACIÓN DEL PARQUE PARA INDIVIDUOS JÓVENES
Lo primero que debe hacerse es destruir los cangrejos, no siendo preciso cambiar el fondo, como en los parques destinados a recoger semilla, peros sí ablandarlo con un rastrillo, hasta unos cinco centímetros de profundidad, para facilitar la penetración de los moluscos; la densidad será de de 200 ejemplares por metros cuadrado; las operación de siembra deben efectuarse un poco antes del flujo y serán preferibles los días no calurosos; para la recolección deben aprovecharse las mareas vivas débiles, evitando los días de tempestad o fuertes calores.
ÉPOCAS MÁS FAVORABLES PARA LOS TRABAJOS
Varían según se trate de parques par la recogida de semilla, parques de cría o de crecimiento de jóvenes moluscos, o parque para el crecimiento de gruesos moluscos.
Para la recogida de semilla de cría empieza en abril y suele durar hasta noviembre en las rías gallegas. Los parques para la obtención de semilla deben permanecer en servicio todo el año; en primavera debe renovarse el suelo, antes de la puesta más abundante y deberá ponerse en servicio en la más débil de las grandes mareas de marzo; al final de julio puede hacerse la primera recolección y al fina de noviembre la segunda; la tercera se hará en marzo, al cambiar el suelo.
PARQUE ARA CRECIMIENTO DE JÓVENES Y ADULTOS
Serán puestos en servicio en julio, noviembre y mayo, y deben visitarse casa trimestre, con el fin de matar los cangrejos que accidentalmente hubieran podido introducirse en ellos; si se forma un depósito de fango, de tres o cuatro centímetros de espesor, se quitará la mayor parte del mismo sin tocar los moluscos. En marzo y abril pueden llevarse los jóvenes moluscos a los parques de adultos o de expedición; es suficiente visitarlo dos veces al año para quitarles el fango.
Dichos moluscos, además del cultivo esmerado que se requiere para que pierdan la consistencia coriácea que tienen los ejemplares criados espontáneamente, es preciso depurarlos, limpiándoles de arena y fango: para esto, el procedimiento más práctico consiste en depositarlos, durante una o dos semanas, en una plataforma de madera, que se mantienen sumergidas y cuyas tablas estarán separadas un centímetro, con el fin de que pase la arena y queden retenidos en ellas los moluscos; dichas plataformas deben estar suspendidas de un andamiaje por cuerdas, con el fin de que puedan moverse con las mareas, y están limitadas por unas tablas que sobresalen unos quince centímetros, a fin de impedir que los moluscos se marchen de la misma; siguiendo esta técnica se logran ejemplares irreprochables, para el mercado y las fábricas de conserva.
Manuel Sánchez y Sánchez. Biólogo de la Dirección General de Pesca. Revista Industrias Pesqueras, año 1949